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No te vuelvas loco buscando tu alojamiento web

Sin duda, tal y como nuestro ordenador hace uso de un sistema operativo (tal como Windows, Linux o MAC OS) los servidores, que son esencialmente ordenadores con más capacidad tienen sistemas operativos propios.

Muchos expertos aconsejan decantarse por servidores con sistemas operativos Linux en lugar de Windows, que trabajan con mayor velocidad de respuesta.

Los servidores basados en Windows terminan siendo más lentos, pesados y no tan seguros. Por ello, es normal que encuentres mejores ofertas para servidores windows, que para hosting con Linux.

Frecuentemente, nos tropezamos con empresas de host que garantizan un uptime del 9.99% o inferior ¿Por qué el uptime es tan relevante en el momento de decidir comprar un hosting?

Básicamente, el uptime (tiempo de actividad) se refiere al tiempo de disponibilidad del servidor sin sufrir caídas.

Es decir, el periodo en el que el servidor trabaja sin interrupciones. Mientras el servidor en que estés alojado este activo, tu sitio estará disponible para cualquier persona que desee visitarlo. El termino DownTime es acuñado cuando el servidor se apaga.

Claro, toda compañía tiene DownTimes programados para realizar operaciones de mantenimiento (como copias de seguridad de los datos del servidor, instalación de parches o modificar un componente del software) sobre los cuales los usuarios son notificados.

Sin embargo, su uptime no debería estar por debajo del 95%.

90% o menos sería fatal.

El motivo es que las caídas impiden que puedas recibir visitas a tu sitio. Eso incluye los accesos de los buscadores. Por lo que, si Google intenta entrar en el sitio mientras está caído, queda registrado y fichado, dando como resultado peores posiciones en los resultados de búsqueda.

Nadie quiere enfrentarse con ello: hasta 1 minuto con un sitio caído puede implicar la pérdida potencial de muchas visitas. Sobre todo, si pretendes monetizar tu sitio.

Es evidente entonces que antes de la contratación debes asegurarte cómo va el uptime en la empresa y que garantías te ofrecen en caso de fallos.

La velocidad de carga de tu web dependerá en gran medida del rendimiento del servidor de tu alojamiento.

Este factor, además del uptime, es importantísimo para el posicionamiento web.

De cara al usuario…¡Nadie quiere tener que esperar horas para poder ver una página!

Si tardan demasiado en entregar el contenido, probablemente se irán los visitantes a tu página.

Otros factores como la integración de una CDN (red de entrega de contenidos) y la implementación de discos SSD o SSD NVMe (que han superado a los discos HDD en velocidad) influyen también a tu favor para aumentar la velocidad.

Opta siempre por el servicio de carga más veloz dentro de tus posibilidades y propulsa así tu negocio o tu proyecto personal. Ciertas empresas como Nicalia, Raiola Networks, Webempresa y Siteground son calificadas con 5 estrellas por su velocidad de carga y uptime.

Normalmente, nos ahorrará muchos quebraderos de cabeza ¿Por qué?

En primer lugar, los servidores que están localizados en el país de donde provienen el grueso de tus visitas o tu público objetivo permitirán una mayor velocidad de carga para ellos.

Teniendo un servidor en dicho país con IP local, tus sitios serán visualizados con una rapidez impresionantemente mayor. Esto influirá a su vez en el posicionamiento (SEO) de los buscadores como Google.

En segundo lugar, es más posible que el asesoramiento técnico de una empresa con data centers en la región donde te encuentres sea en tu propio idioma. De modo que, al presentarse problemas técnicos de diversa índole, la solución sea comprendida de mejor forma.

También debes examinar donde están ubicadas sus oficinas o centros de atención, pues puede que no lo estén en el mismo lugar que los centros de datos.

No necesariamente las enormes ofertas con precios ridículamente bajos son la mejor elección

¿Por qué razón? porque pueden darte a cambio un servicio de mala calidad, poco optimizado y en el cual acabes abonando extra. Asimismo, has de ser muy precavido con lo que algunos esconden en las letras pequeñas del contrato.

Es fácil que incluyan restricciones, limitaciones, condiciones irrisorias o importes extras que te verás obligado a pagar. Probablemente, los hostings gratuitos te mostrarán constantemente anuncios o harán negocios con tus cookies vendiendo esos datos a otras empresas.

Por otro lado, el rendimiento de tales empresas gratis suele ser nefasto. El típico caso de un funcionamiento “a veces sí, otras no”. Quizás haya quienes se animen a hacer pruebas o algún proyecto casual con fecha de caducidad.

No obstante, para un proyecto serio no es recomendable. Mejor opta por uno que disponga de buenos precios dentro de tu presupuesto y que sea escalable.

Revisa las reviews de cada proveedor de hosting que tenemos preparadas para ti, conoce las opiniones de los usuarios, y decide el que consideres mejor para tu proyecto.

No debes desechar inmediatamente una empresa por no tener ciertos recursos. Ante bien, puedes aprender a realizar ciertos procesos, configuraciones e instalaciones por tu cuenta.

En el extraño caso que tu proveedor no disponga de CDN (red de entrega de contenidos) con facilidad puedes acceder al servicio gratuito de CloudFlare CDN. Paso a paso podrás instalarla sin inconveniente.

Existen extras como la migración de un host a otro que requieren de más conocimientos técnicos avanzados. Por supuesto, si no dispones de conocimientos avanzados en programación y sientes dudas, es mejor dejarlo en manos de un perito.

Sin embargo, muchas empresas ofrecen tutoriales didácticos y muy explicativos que te indican el proceso.